Te amo cada día.
Agarra fuerte mi mano, vamos a darle vueltas al mundo, más de las que da la vida.
Sigue mirándome con esa ternura, que me hace llegar a un lugar dónde todo puede ser posible, si eres tú mi compañía.
Miro al horizonte y aunque el futuro sea incierto, veo una vida en conjunto, que siempre se escapa de la monotonía.
Tu sonrisa, me hace más amena la vida, esos hoyuelos traviesos, me llenan de alegría.
Descubrir lugares a tu lado, es la mayor de mis fantasías.
Eres mi compañero soñado, ese que nunca habría imaginado, pero aquí estás y tres años después, haces que la palabra amor tenga sentido y sea sentimiento compartido.
Ya no es una película romántica de ficción de una tarde de domingo, este guión lo creamos diariamente tú y yo.
La brújula, ya nos ha marcado todos los puntos cardinales, pero quiero seguir perdiendo el rumbo, el sentido del tiempo y espacio contigo.
Un camino de aventuras, de ilusiones compartidas, de sueños realizados, de deseos por cumplir. Te amo cada día.
Complicidad, amor, amistad, risas, ternura, cariño, calor, comprensión, diversión, caprichos, hogar, ilusión, esas palabras representan nuestra unión.
Habla la leyenda que las personas destinadas a conocerse, están conectadas por un hilo rojo invisible. Este hilo nunca desaparece y permanece constantemente atado a sus dedos a pesar del tiempo y la distancia.
Aunque me encantan las historias románticas, lo nuestro fue complicidad a primera mirada, el tiempo, fue poniendo todo en el lugar correcto con nosotros dos, pero más que creer en la unión de un hilo, creo en la magia que tenemos tú y yo.
Creo en todo lo que hemos ido diseñando en conjunto desde que se cruzaron nuestros caminos hace trece años.
Hasta hace tres, con el choque de nuestros cuerpos fusionados pasionalmente en uno solo, nuestra saliva compartida.
El tacto de nuestra piel, la locura transitoria que estábamos sintiendo y gozando, como si llevásemos mucho tiempo esperando a que ocurriese, pero tuvo que ser así, tuvo que ser aquel día.
Desde ese día, fuimos conscientes de que ese era nuestro lugar correcto y hasta día de hoy, no puedo dejar de pensar en aquel bendito momento, que me ha complementado y me ha hecho compartir una vida a tu lado.
No fue difícil decirte mientras te abrazaba fuerte; ¨Te amo¨ aun sin saber el día anterior que de ese modo te quería, pero la realidad es que desde aquel 19 de octubre de 2019;
