¿Alguna vez has pensado en escribir una carta de amor? Existe un lugar mágico en el mundo, como aquellos donde los enamorados ponen los candados con sus nombres con toda la ilusión que nos hace sentir el amor. Se trata de Verona, una ciudad inundada por el amor de Romeo y Julieta, que no es la mejor especificación del amor, ya que no habría que morir por él, si no […]
En nuestros atardeceres a veces salen las conversaciones sobre el amor. Me hablas de hormonas, yo te hablo de sentimientos, lo llamas cúmulo de pensamientos, ideales adictivos, yo lo llamo impulso e ilusión. Nos sentamos uno frente al otro, debatiendo nuestras absurdas teorías y nunca llegamos a ninguna conclusión. Yo te hablo de la risa descontrolada, del amor eterno, tú me lo discutes pensando que es un ideal, mientras tanto yo
Mordiendo segundos pasa la vida, y los momentos vividos. Podría haber sido la misma basura que envuelve la ciudad, las quejas diarias sin sentido que no dejan que el salvajismo, dibuje círculos de ilusión. Los dramas inexistentes que atormentan a las neuronas. Y de repente hablando de vacío, y suciedad, de falta de entusiasmo, de querer solucionar las vidas ajenas, llega una canción o un juego rebelde que te hace,
Desde el primer momento en el que le vi, no fui capaz de mirar a otro lugar, aun con la especialidad de personas que nos estaban rodeando, lo mejor que sentí fue en nuestro reencuentro. Fueron tantas canciones sin él, tantas sonrisas marchitas, tantos roces sin sabor,tanto paseos buscándole por cualquier rincón. Que cuando apareció, me pellizqué y solo supe tartamudear y llorar de alegría. Adoré nuestro reencuentro, como si
